Cementerio de animales

La familia Creed se muda a una nueva casa en el campo. El lugar es perfecto, excepto por dos cosas: los grandes camiones que suelen pasar por la carretera que hay cerca de la casa y el misterioso cementerio de mascotas que se oculta en los bosques que hay detrás.

Todo un éxito de taquilla (recaudó casi 45 millones de euros solo en Estados Unidos con un presupuesto de apenas ocho), basado en "Cementerio de animales", una de las más escalofriantes novelas de Stephen King, cuyo autor se encargó de adaptarla al cine. Aunque el maestro del terror no solo se centró en las letras, pues quiso aparecer en la cinta en forma de 'cameo', dando vida a un cura. De este modo, King se convirtió en una de las pocas caras conocidas de un reparto en el que los seguidores del género podrán reconocer a un desmaquillado Fred Gwynne, el eterno Herman Montser de la mítica serie "La familia Monster".

Fue dirigida por Mary Lambert, que tres años después se encargaría también de su secuela, esta ya mucho...